Las cosas se pueden plantear de muchas maneras. Pero sólo hay una manera de enfocar la vida: tragedía. Ya definamos esta en términos de tristeza o de ausencia de felicidad, lo cierto es que la plenitud no existe se busque donde se busque... ¿por que será?. Es en sí una contradicción, buscamos la felicidad pero nunca la alcanzaremos y aun así seguimos viviendo. ¿para qué entonces?. Algunos deciden lejos de ser objetivos -es imposible serlo aquí- que vivimos para cumplir un objetivo, una misión o cualquier otra vanidad. Cualquier cosa que se presente puede ser objetivo de vida. Lejos de entender para que vive el hombre, debería ser exponente común el saber porqué vivo yo. O tú. O aquel. Bueno, yo se que cosas me agradan y cuales no, que me hace feliz y que me sumerge en la desgracia. La vida es que como una partida de ajedrez, y hay que mover piezas para conseguir los objetivos... Cada recurso a nuestro disposición es una pieza en el tablero, y desde luego sin nos dan jaque mate no tenemos nada que hacer. Cada movimiento afecta a nuestra consideración de la situación... siempre intentaremos tener el mayor número de cosas a nuestro favor. Sin embargo, ¿es posible...? Nada es posible. ¡Todavía nadie me ha explicado porque debo jugar la partida de ajedrez!. No se porque debo verme mezclado en una jugada de proporciones mundiales ni que narices pinto yo en esto. Reconozco que el juego tiene sus cosas buenas... sí: amor, dinero,.... todas las vanidades que quieras y alguna más que se te pueda ocurrir. Sin embargo, es mucho peor lo que ocurre cuando de verdad piensas.... te das cuenta de que el tablero no termina donde acaban las piezas... lo fragmentas todo y lo reconstruyes en trozos más pequeños para ver si encaja. Y claro que encaja, pero no encaja en una sola posición, encaja en varias... Y ¿como lo encajas? Claro, seguro que existen personas que se piensan que las cosas tienen manual de instrucciones. Sacan su libro de instrucciones para la vida y consultan el capítulo de rayadas... Yo no puedo hacer eso, si tuviera el libro en mis manos lo quemaría: nada de lo que alguien me pueda decir sobre su vida puede explicarme la mía. Y quizás llegue el día en que nadie tenga nada que decir. Todos sacarán el manual y lo abriran por la misma página en el mismo momento: ¿a quien le importa?. O quizas no haga falta eso, habrá dos grupitos de personas; estarán los que puedan comprar el libro y los que no puedan hacerlo... Siempre la misma historia. Y otras que aún están por llegar... que gran futuro que le espera a la humanidad. Lo mejor es que la gente cree que las cosas van mejor ahora que hay paz que antes que había guerra. Es muy bonito, no hay ningún pueblo que se sienta humillado, todos somos hermanos. Sin embargo, las cosas no están así. Ahora ya no dirige el pueblo, dirije el gobierno. No hay guerras; significado: ¡ya nadie defiende sus ideales!. Pero da igual, como animales nos vamos a ir a la mierda, ningún animal es tan inteligente como para cargarse su propio entorno. No pasa nada, mientras diriga el gobierno da igual. Se saca un fajo de billetes y se saca oxigeno de las piedras. Todos mueren excepto cuatro personas con buenos bolsillos. Mejor aún, nos joden el planeta a todos cuatro señores con bigote y luego cuando tengamos que irnos a otro -si podemos- pues nos vamos con lo puesto. Es muy divertido desde luego, pero sólo para el que lo mira, no para el que lo sufre. Pero es otra pieza más, se puede interpretar de muchas maneras y da igual. Nadie va mover un dedo para salvarse. Para empezar se tendría que pensar y eso no está de moda. No es nada fashion y por tanto no vas a ser más guay, así que la mitad del planeta se lo puede ahorrar. La otra mitad vive en el tercer mundo, o quizás ya sea el cuarto.... a esos políticos con alejarlos de la gente de corbata les da lo mismo. Bueno, que detallazo que de vez en cuando les enviamos en la bodega de un avión un billete en dolares patentados y registrados original american para que no se piense la gente que no hacemos nada. Eso sí, luego al avión se le desinfecta por sí acaso... no vaya a ser que una bacteria nos de un bocado en la opinión pública. Y en realidad es de risa.... de esa que se emite cuando te das cuenta de que no puedes hacer nada. Es mejor así, te recluyes en algún sitio, manejas algo con forma cuadrada y lo observas por la C.N.N. Quizás alguien coja sus piezas y construya otro puzzle, que tú a lo tuyo. Si no sale por la tele no es importante que te pierdas la siesta. Pero da igual. A ver si vienen los marcianos, llegan aquí de repente y nos matan a todos. Serían más listos que nosotros. Nosotros nos dedicamos a jugar a la playstation con lo último en diseño gráfico. Es muy excitante, siempre ganamos. La putada es cuando pierdes una vida, entonces si que duele. A la moral claro. Deberían de sacar un juego que te metiera un tiro cuando te matan; eso si que sería game over. Enseñaría algo que no está en el manual: el pasado no puede rectificarse. Es curioso, pero nadie lo sabe. Claro, a veces te enamoras de un billete porque tiene un color muy verde... ha vivido mucho, se mojó en su día y ahora palidece un poco, pero cuando lo pones al sol reluce y eso queda bien. Es un rollo en realidad, si el billete decide hacer las maletas y largarse con otro no pasa nada, te acercas al banco que es como una casa de putas y tienen mercadillo. No cobran mucho porque elijas y desde luego la nueva gama de euros es un vicio. Pues nada, otro día al saco, que es donde van a ir a parar todas las personas. Menos mal que el hombre no es inmortal, me da igual lo que ocurra cuando la palme; con tal de no tener que vivir para ver como nos matamos mucho mejor. Si incluso podemos decidir un día jugar a ser Dios: es muy fácil, te pones el traje, te anudas la corbata, abres la maleta y aprietas un botón... al rato unos cuantos misiles se han cargado un país entero. Incluso haces una fiesta para celebrarlo. Invitas a todos, incluido a la serpiente; no es la de la biblia, no; es el serpiente de tu abogado. Te han puesto un pleito por disparo incierto... ¡parece que te has cargado un país que no era!. Bueno, da igual. Tienes comprada la C.N.N., y si alguien dice algo que no te guste pues le envias un regalo y listos. Tus regalos siempre son la bomba. Por cierto, que llegas tarde a la fiesta. ¿recibiras muchos aplausos, o sólo los acostumbrados?. Pues no se quien lo dijo, pero eso de crimen y castigo no se lo cree nadie. Que le jodan a todo... la humanidad está acabada. Da igual lo que hagamos. Ojala pudiera cojer una hipernave dar un salto a través del hiperespacio y aparecer a millones de años luz de la tierra. Me llevaría al grupito de personas que quedan con cabeza y lo intentaría de nuevo. Y lo más gracioso es que seguro que volvería a fracasar. No sí Nostradamus no se equivocaba, tres oleadas acabaran con la humanidad: ¡La Codicia, la Mentira y el Odio!
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